Esta es una patología propia del verano, pero también de los que practican montañismo, donde las sombras en ocasiones son difíciles de obtener y el sol nos castiga sin compasión, incluso en invierno en un glaciar, también podemos sufrir golpe de calor, síncope y calambres por calor e insolación y deshidratación severas. Me ha parecido interesante dar toda la […]