Prevención con lluvias torrenciales

Cuando somos sorprendidos por este fenómeno, hemos de pensar que no es una inundación donde el caudal va subiendo poco a poco, el torrente de agua aparece de una forma repentina y violenta, en ocasiones la gente lo describe como una ola, un tsunami que arrastra todo a su paso.

Hemos de diferenciar, lo que es un río que baja con mucho caudal por distintas razones, lluvias repentinas, deshielo etc, donde el río cohabita con el hombre, se conocen sus dominios año tras año, y otra, una torrentera, una rambla, etc, son zonas por las que pueden pasar muchos años sin ver bajar aguas torrenciales.

Estos son muy destructivos, en ellos pueden darse dos compuestos:

Socavantes: Erosionan el fondo y los márgenes del cauce, arrastran mucha materia, pueden desmenuzar zonas, desmoronar parte de una ladera, provocando derrumbes.

Depositantes: Estas pueden sepultar una zona, represar el torrente en un punto, puente, o cualquier obstáculo, volviendo a romperlo convirtiéndose de nuevo en socavante, para finalmente depositar todo el «sedimento» sobre un área.

Estos cauces presentan múltiples, trenzados que se entrecruzan y cambian de posición constantemente. Caer al río es muy peligroso, supone golpearse con muchos objetos, que pueden ir desde una bombona de butano, lavadoras, depósitos para diversas funciones, cisternas, vehículos, furgonetas, caravanas, hasta container, ¡ramas y troncos también, claro!.

La limpieza de las ramblas y torrenteras es necesaria.

Pero… ¿qué limpiamos? cañas o vehículos de todo tipo abandonados, troncos o container, cisternas etc.

Muchos puentes aguantan el envite de ramas y troncos, otros, quizás no están preparados para que se queden bloqueados por vehículos etc, cuando estos torrentes desembocan en el mar estos residuos sólidos creados por el hombre, son un peligro para la navegación marítima, pues en muchas ocasiones, permanecen flotando a la deriva mar a dentro durante mucho tiempo.

Cuando haya alertas de lluvias torrenciales, difundidas por Protección Civil, hay que tenerlas en cuenta. Es responsabilidad de todos, no dejar residuos sólidos dentro de estas zonas, o tomar las precauciones necesarias para que no puedan ser arrastradas, así sacar los vehículos, animales domésticos, etc,. a un lugar seguro, ayudaremos a minimizar los efectos provocados por este tipo de emergencias.

Por desgracia, en ocasiones esto es imposible de aplicar, pues urbanizaciones enteras desconocen que son inundables, ¡cosas que pasan!

Como recomendaciones generales he querido poner las que más evidentes me han parecido:

• Las aguas torrenciales aparecen repentinamente, provenientes de cuencas que han captado mucha agua en poco tiempo.
• Salir rápido del cauce del río, no hay tiempo para nada que no sea salvar la vida.
• Si la casa es rodeada, y esta tiene pilares de hormigón es muy posible que esta aguante el envite, hemos de buscar una escalera subir al tejado.
• Si la casa es prefabricada, la mejor opción es un árbol grande, esto hemos de hacerlo antes de ver la evolución del torrente, después será muy difícil cambiar de ubicación.
• En unas horas la mayor fuerza del torrente decrece, esperar en ese lugar es lo más prudente.
• Si nuestro refugio no esta sobre la corriente, está inundado, el refugio es bueno, no salir de el, pues en estos traslados es cuando se comenten muchos errores.
• Considerar un vehículo como un refugio es un error, pues estos son arrastrados con facilidad por la corriente.
• No permanecer sobre puentes ni bajo ellos.
• Alejarse de los márgenes del cauce, por peligro de desprendimientos que no alcanzamos a ver.
• Pasado el temporal hay muchas zonas inestables, moverse con precaución.
• Mantener la calma y ser objetivos, esto hará que tomemos las decisiones más acertadas.

Estas consideraciones son orientativas, no tienen el rigor de un estudio científico, he intentado aplicar el sentido común, como siempre en esta blog de seguridad en montaña se admiten aportaciones positivas.

He hecho un vídeo dando unas pequeñas, recomendaciones generales, en acontecimientos que ocurren cada mucho tiempo, pero no por eso, vamos a pensar que nunca nos pasará, el agua no va por donde queremos que lo haga, en ocasiones, esta elige el camino.

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