encorda2
Historias diciembre, 2011

Rescate, Derechos Humanos

desorientación

Tengo una historia que contaros, el día de los Derechos Humanos, aún hoy, sigo sin palabras, sin saber qué pensar, era Mayo de 2008.

Os cuento lo que pasó: Juani y Chema, dos montañeros avisan de que hay una persona cerca de la cumbre del Trevenque, que se encuentra muy mal y que está sin fuerzas, cuando llegamos al lugar, lo abrigamos le dimos de beber y comenzamos a bajarle, al poco tiempo, no podía sostenerse en pie y tuvimos que sacarle en camilla parte del recorrido, no es le primera vez que nos pasa esto, muchas personas que huyen de la pobreza, llegan a las playas de Motril, allí caminan dirección norte, sin saber que en esa dirección está Sierra Nevada, una muralla de más de 3000 metros que han de sortear.

Mapa: Punto A Motril, Punto B cercanías Pico Trevenque (2.079m), no hagáis caso al recorrido que marca desde el punto A al B, nada tiene que ver con el recorrido que esta persona haría.

Os dejo unas fotos que me proporciona Juani y Chema:

Llegada, abrigo y agua

Llegada, abrigo y agua

Rescate Derechos Humanos

Abrigándole antes de salir

Rescate Derechos Humanos

Bajándole por la pendiente, apenas se sostenía.

 

Rescate derechos humanos

Rescate derechos humanos

Rescate Derechos Humanos

Al límite de sus fuerzas

Rescate Derechos Humanos

Le introducimos en la camilla

Rescate Derechos Humanos

Cerrando la camilla

Rescate Derechos Humanos

Protegiendo de la hipotermia

Rescate Derechos Humanos

Bajándole en camilla

Rescate Derechos Humanos

Llegando al final

Nunca más supe de él, yo hice mi trabajo, o quizás no! le rescatamos o le hicimos una gran faena!, seguramente acabó en un avión de vuelta a su país, no tenían que existir fronteras.  ¡Autopistas! para los que huyen del hambre, guerras, dictadores, etc, por desgracia el hombre maquiavélico, en esas cuestiones es muy diverso.  Mejor que todo lo anterior sería que nadie tuviera que huir por hambre guerras y dictadores, así tendría la conciencia, de que el rescate de aquél día, lo fue realmente.

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22 Comentarios

  • Responder Andrés 10 diciembre, 2011 a las 6:37 pm

    Precisamente vengo del Trevenque. Se me acaba de quitar el cansancio de golpe.

    Una historia impactante, sin duda.

  • Responder lokofilms 10 diciembre, 2011 a las 6:45 pm

    Vaya historia, uno se queda sin palabras…

  • Responder pamatru 10 diciembre, 2011 a las 7:54 pm

    A pesar de la dureza de las imagenes me sigue dando envídia tu trabajo, por las recompensas que tiene… la admiración, el respeto, la humanidad, la sensibilidad, la humildad… en situaciones extremas surgen los grandes valores de las personas. Gracias por compartir con todos tus emociones.

  • Responder Julia 10 diciembre, 2011 a las 9:55 pm

    La fortaleza que deben tener ustedes es increíble física y espiritual. Valoro enormemente el trabajo que hacen.

  • Responder kitaro 11 diciembre, 2011 a las 7:04 pm

    Una gran labor la vuestra, impagable y dura a la vez.

    Un fuerte abrazo.

  • Responder Franci 11 diciembre, 2011 a las 10:03 pm

    Impresionante.
    Ya me lo contaron y aún así me resulta emocionante.
    ¡Chapó! Todo un ejemplo una vez más.
    Enhorabuena.

  • Responder Maria Bonastre 11 diciembre, 2011 a las 10:31 pm

    Felicidades por la tarea!
    Sin duda, le rescatasteis… por lo menos está vivo.
    Sin vida no hubiera tenido oportunidad de volver a su país ni de quedarse en Granada… no hubiera existido, simplemente.

  • Responder anarrunategui@hotmail.com 12 diciembre, 2011 a las 12:48 am

    solo compartir esta experiencia!!!

  • Responder Chema 12 diciembre, 2011 a las 10:09 am

    A pesar del tiempo de esta feliz historia, pues no se le puede llamar de otra manera, aun recuerdo la mirada de ese hombre que buscaba el camino hacia la libertad. Gracias a todo el equipo que formáis y el buen trabajo que realizáis

    • Responder encorda2 12 diciembre, 2011 a las 10:42 am

      Gracias Chema a ti! sin duda mucho tuviste que ver en el feliz desenlace.

      Saludos.

  • Responder Rubén 12 diciembre, 2011 a las 4:56 pm

    Espeluznante. Me ha recordado a una historia que viví hace unos doce años en Tarifa, en la Sierra del Retín, donde trabajé en unos inventarios de avifauna. Una mañana nos encontramos a un nigeriano caminando hacia el este. Nos preguntó si le faltaba mucho para Murcia. Se nos pusieron los pelos de punta. Le dimos la comida y el agua que teníamos y se marchó …

    • Responder encorda2 16 diciembre, 2011 a las 5:14 pm

      Esperemos que llegue el día, que el mundo esté mejor repartido.

  • Responder Felipe 12 diciembre, 2011 a las 5:19 pm

    Hola compañero
    A mi me pasó algo parecido en mi etapa de rural y tampoco se me olvida.
    Recibimos un aviso y tuvimos que ir a buscar y detener a un «negro» que andaba por el arcén de una carretera que no hacía daño a nadie y que me pareció muy culto y educado y que terminó en extranjería. No sé porque aquel caso fue diferente para mí pero supongo que él era diferente y me hizo sentir muy mal.
    Tu historia me ha conmovido como la de aquel día de hace ya unos cuantos años y que me hizo pensar mucho, ellos están tan cerca del sueño de Europa y nosotros los tenemos que devolver a la miseria y a volver a jugarse la vida en una patera.
    De todas formas vosotros le salvasteis la vida y estará contento y agradecido por ello.

    Un saludo desde Navacerrada y enhorabuena por tu blog que leo asiduamente.

    • Responder encorda2 16 diciembre, 2011 a las 5:17 pm

      Te comento lo que me han puesto en un foro, lo cual me parece muy acertado: «Que raro un mundo en el que a veces ser humanitario puede ser tan contradictorio»

  • Responder Antonio Gámez (Lanteirano) 17 diciembre, 2011 a las 4:33 pm

    Pedro, he visto hoy este rescate y da que pensar lo injusto que a veces es este mundo, agradeceros una vez más vuestra labor.
    Un abrazo

    • Responder encorda2 18 diciembre, 2011 a las 5:18 pm

      Gracias Antonio! otros montañeros, Protección Civil, nosotros y también «montañero horizontal» seguro también participará.

  • Responder Sergio Rodriguez 16 enero, 2012 a las 4:06 pm

    ESPECTACULARRRR!!! Felicidades por vuestra labor.

  • Responder Marta 10 diciembre, 2013 a las 5:45 pm

    Pelillos de punta.
    Muy buena vuestra labor y acción pero si…seguramente terminara en un avión de vuelta al país del que huye. Qué contradictorio.

  • Responder KIki 10 diciembre, 2013 a las 7:40 pm

    Solo salgo por aquí para agradeceros vuestra labor. Esta historia, como muchas otras, no hacen nada más que corroborar la gran calidad humana que lleváis como bandera. Cuando salimos a la montaña, gracias a personas como vosotros nos sentimos más protegidos. Más abrazados. Sabemos que no estamos solos y aunque siempre pongamos medios para minimizar riesgos no estamos libres de mil peligros. Arriesgáis vuestra vida por nosotros y ésto siempre tenemos que agradecéroslo. Mil gracias por estar ahí.

  • Responder Ángel 10 diciembre, 2013 a las 7:32 pm

    Hola, Pedro. Yo viví en agosto del 2.007 una situación parecida en el Veleta. Pero con el agravante, de que los «montañeros» que allí estaban cuando llegué a la cima, pasaban muy tranquilamente de lo que le podía ocurrir a un chico negro que estaba tirado en la construcción que hay en la cima. Podía haber estado muerto y ellos, tranquilamente comiendo sus bocadillos al lado.

    Siempre agradecido por vuestra labor. Que aunque sea profesional y elegida voluntariamente, siempre es admirable.

    Saludos.

  • Responder Jorge Picallo 11 diciembre, 2013 a las 8:35 am

    Me parece un reportaje conmovedor, muchas gracias por vuestra labor, lastima que nuestros politicos, banqueros, dirigentes y demas gente parecida no aprendieran un poco de vuestro espiritu solidario y de ayuda.

  • Responder Remi 11 diciembre, 2013 a las 5:26 pm

    Qué orgullo compañero! Enhorabuena.

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